Sandra Sánchez ha puesto el nombre a la primera ganadora de la medalla de oro en karate en unos Juegos Olímpicos: los de Tokio 2020.
O quizá, simplemente, ha puesto el nombre al karate. En general. Especialmente porque lleva cinco años como número 1 del mundo; una cima que no ha abandonado en el debut de su deporte en los Juegos Olímpicos.
Su rival en la final, SHIMIZU Kiyou, de Japón, hacía la lucha por el oro aún más interesante: la número uno del mundo (Sánchez) frente a la segunda en el ranking mundial (Shimizu). La kata que iba a definir el oro era chatanyara kushanku, que le dio la victoria a la española en el Campeonato del Mundo de 2018.
Y el resultado ha sido el mismo: la victoria. Sandra Sánchez ha recibido 28.06 puntos para superar la kata de la karateca japonesa, que ha sumado 27.88 puntos.
Sánchez lo ha celebrado entre lágrimas -dealegría- ahogadas por una gran sonrisa. Era lo único que le faltaba en una carrera que ya era de oro.
Este oro Olímpico se une a una carrera impecable, en la que ha ganado seis Campeonatos de Europa -el último, el pasado mes de mayo de 2021-, el Campeonato del Mundo de 2018 y en la que la Federación Mundial de Karate le nombró en 2018 como ‘La mejor de la Historia’.
«Por supuesto que va a ser una final especial. Creo que mucha gente ha estado esperando esto. Espero que las dos [por su rival en la final, podamos hacer el mejor karate que podamos, y yo espero poder ganar el oro», decía Sandra Sánchez después clasificarse a la final.Y lo ha hecho realidad.
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