ChatGPT y la inteligencia artificial se han convertido en la moda actual y están sorprendiendo a usuarios anónimos y a destacadas personalidades por sus diversas funciones y sus potenciales aplicaciones aunque no vienen exentas de su contraparte, así como atrayendo la atención de las principales empresas tecnológicas.
Uno de esos famosos de la industria ha sido Steve Wozniak, cofundador de Apple, que ha asegurado a CNBC que ChatGPT le parece «bastante impresionante» y «útil para los humanos», aunque también ha advertido de que «puede cometer errores espantosos al no conocer lo que es la humanidad».
Otro es Bill Gates, cofundador de Microsoft, que ha ido soltando halagos sobre ambas en varios medios, hasta el punto de señalar a la IA como la próxima revolución tecnológica: «Es la más grande» y «tendrá un impacto enorme», ha afirmado.
Gates sostiene que ha estado interesado en la IA desde que comenzó a aprender sobre software, que le «entusiasman» los últimos avances —entre los que se incluye ChatGPT— y que esta es tan histórica como el PC e internet: «La idea de que los ordenadores vean, oigan y escriban es la búsqueda a largo plazo de toda la industria», ha declarado a Forbes.
«La IA va a ser objeto de debate» y «será el tema más candente de 2023», ha comentado. Por un lado, podría descontrolarse o ir en la dirección equivocada; por otro, tiene la capacidad de «cambiar el mercado laboral» y de provocar que las personas se pregunten «cuáles son los límites».
En cuanto a cómo puede transformar el trabajo, sus afirmaciones parecen acercarse a otro tema en tendencia: el de la semana laboral de 4 días: «En un futuro lejano tendremos que trabajar menos que hoy», ha declarado a Handelsblatt.
Según publica el medio alemán, Gates no cree que la inteligencia artificial ponga en riesgo ningún puesto de trabajo —no habrá menos profesores ni médicos, afirma—. Es más, considera que las horas de trabajo podrían disminuir a largo plazo: la IA se encargaría de las tareas más rutinarias o mecánicas y las personas podrían centrarse en las actividades más importantes del trabajo.
«Podemos empezar a pensar en la idea de que nuestras vacaciones serán más largas en algún momento, Si realmente podemos producir el doble de lo que producimos hoy con menos trabajo, el propósito de la humanidad tampoco debería ser sentarnos detrás de un mostrador y vender cosas», explicó entonces a Fox Business.
Bill Gates también ha calificado a ChatGPT de «muy imperfecta» y «poco intuitiva», ha apuntado que la ha visto «equivocarse completamente» en problemas matemáticos y ha admitido que «la modernidad también conlleva algunos riesgos» y que la innovación y evolución no garantizan resultados positivos, pues pueden dar lugar a peligros como las armas nucleares o el terrorismo biológico.
«Pero, en general, soy increíblemente optimista» sobre el futuro, sostiene ante CNBC. «La cantidad de innovación [para] la mejora general de la condición humana va a seguir siendo espectacular. Curaremos la obesidad, curaremos el cáncer, erradicaremos la polio», concluye.
Editor de la Revista Eventos En Red impresa y digital, con más de 15 años en circulación, nos caracteriza la multiculturalidad.